Para eludir el cerco de las autoridades, las webs van migrando sus dominios, camiseta de bayern munich por lo que Carlos no tuvo ningún comerciante fijo en los casi cuatro años que estuvo llevando a cabo esta práctica. Era el caso de Carlos, un joven de 26 años que hasta hace tres años se dedicaba a realizar grandes pedidos de camisetas para después distribuirlos a terceros . Era un olor que yo jamás había olido.