Es decir, participa de forma directa en más de un gol por partidos. Y aun así, ha firmado números propios de un cyborg: 27 goles y 5 asistencias en 29 partidos con el Borussia Dortmund. Un delantero que sigue quemando etapas a pasos agigantados y que ya se ha colado entre los grandes nombres del panorama futbolístico actual. Una apertura al extranjero en la que incide la propiedad, que ya ha dado pasos hacia delante en los últimos años.